7 consejos para vivir aventuras en la montaña con sensibilidad y conciencia medioambiental
Salir por la montaña es una de las formas más inmersivas de disfrutar de la naturaleza y recuperar la conexión con tu “yo” desenchufado. Dedicar tiempo a actividades al aire libre ofrece numerosas ventajas para la mente, el cuerpo y el alma. En la montaña o en la costa, dar un paseo, por corto que sea, es ahora un ritual para muchos de los que buscamos más contacto con la naturaleza y queremos contrarrestar el peso de la tecnología en nuestras vidas.
Como en cualquier desplazamiento que hacemos, somos responsables de la huella (literal y metafóricamente) medioambiental que dejamos cuando nos disponemos a vivir una aventura. Ser respetuoso con el medio ambiente significa pensar en el planeta, y eso influye en cómo te comportas y consumes. Por ejemplo, puedes tomar decisiones que favorezcan las prácticas sostenibles y regenerativas. Dicho esto, aquí tienes unas cuantas ideas que te ayudarán a cobrar conciencia sobre el medio ambiente a la hora de planificar tu próxima aventura en la naturaleza.
1. Consumo consciente
Puedes empezar ya, incluso antes de salir a la montaña; simplemente plantéate qué equipamiento necesitas comprar y dónde lo vas a comprar. Cuando compras algo, lo que te empuja a comprar mejor y comprar menos es, en gran medida, un cambio de mentalidad. Tenemos la suerte de tener de todo al alcance de la mano, y eso nos permite investigar qué marcas son honradas y crean productos de alta calidad. Si eliges cuidadosamente, este tipo de equipamiento te acompañará en tus aventuras en los años venideros. Bajo peso, durabilidad y polivalencia son las características clave que te interesará buscar a la hora de hacer una compra. De este modo, te harás con productos multifuncionales que te acompañarán a todas partes cuando viajes.
Elige el calzado con sabiduría. Tus pies te agradecerán que lleves un calzado cómodo, transpirable y con buen apoyo, porque ellos son los que más trabajan cuando te mueves por la naturaleza. Las sandalias LIZARD TREK forman parte de la gama LIZARD de sandalias para senderismo y para caminar, dan prioridad máxima a la comodidad y ofrecen una sensación de bajo peso como ninguna otra. Los cierres de velcro dobles garantizan un agarre ceñido incluso en rutas largas, mientras que el empeine está fabricado con tejido de cincha 100 % reciclado, lo que significa que la sandalia TREK reduce su impacto medioambiental sin sacrificar prestaciones. Gracias a su versatilidad, estas sandalias pueden acompañarte desde el suelo mullido de un bosque a los acantilados marinos y, además de ayudar a que tus pies respiren, te ofrecen un apoyo firme, son especialmente funcionales, y son tanto para mujer como para hombre. Justo eso es lo que hay que buscar a la hora de comprar el equipamiento básico. LIZARD es una empresa italiana con más de un siglo de historia en fabricación de calzado; puedes confiar plenamente en sus productos cuando te dispongas a elegir tu calzado para el aire libre.
¿Tienes ya otros artículos que podrían utilizarse o adaptarse para tus aventuras? ¿O quizás podría algún amigo prestarte las cosas que te falten? Si vas a comprar algún artículo que te falte, es un momento ideal para sentarte a pensar y elegir productos que la Tierra te agradecerá. Las plataformas de segunda mano como eBay o Facebook Marketplace son excelentes para buscar cosas como mochilas y tiendas de campaña que muchas veces están en perfecto estado o apenas se han utilizado. Comprar artículos de segunda mano favorece una economía más circular, donde los artículos son apreciados durante más tiempo y tardan más en acabar en un vertedero.
La reutilización del equipamiento va más allá de la ropa que te pones. Hay muchos artículos reutilizables, como botellas de agua, recipientes para alimentos y pañuelos (¡sí, pañuelos!) que ofrecen alternativas duraderas y contribuyen a reducir el número de artículos que van directamente al vertedero después de un solo uso. Algunos de estos artículos tienen características muy interesantes. Echa un vistazo a los tarros con aislamiento para alimentos de Hydroflask: son a prueba de fugas, mantienen caliente la comida caliente y fríos los alimentos fríos, y cuentan con garantía de por vida. Actuar por el bien del planeta nos sirve de inspiración y nos hace sentirnos protagonistas. Por eso te invitamos a reutilizar, regalar o compartir tu equipamiento para servir de inspiración y que otras personas hagan lo mismo.
2. Vivir lentamente
Vida lenta. Es un estilo de vida que encarna un ritmo más lento e invita a la sencillez y la sostenibilidad. Este concepto es ahora muy popular, ya que cada vez más personas valoran las experiencias significativas y están reduciendo el consumismo impulsivo. Este movimiento no tiene reglas definidas. Más que lo que haces, lo que cuenta es lo que decides no hacer.
El movimiento slow food fue la punta de lanza de un concepto más amplio de vivir con lentitud. El manifiesto surgió en Italia en 1989 y reconoce la “intensa conexión entre el plato, el planeta, las personas, la política y la cultura”. Fomenta el contacto con la comida, los alimentos de temporada, los alimentos de kilómetro cero y la planificación de las comidas para reducir el desperdicio de alimentos. A partir de ahí también surgió la idea de ver dónde se puede prescindir del uso de envases con plásticos para reducir nuestra huella. También es cada vez más popular la idea de salir al campo a recolectar alimentos naturales, porque anhelamos conocer mejor nuestros alimentos y tener una relación más estrecha con ellos. Te invitamos a que pruebes tú también cuando salgas al campo o cuando vayas de acampada, porque cocinar productos que has recolectado tú mismo es una satisfacción muy especial. De esta manera consumirás más alimentos de temporada y de kilómetro cero, con lo que muchas veces conseguirás limitar tu huella de carbono. Importante: si no tienes un 100 % de certeza a la hora de identificar algún alimento, ni se te ocurra consumirlo.
Si te planteas vivir con lentitud y sabiendo lo que quieres, te implicarás más en las cosas que te hacen sentirte más realizado. Se trata de definir qué es lo más importante para ti, y darle una mayor prioridad. Pasar tiempo en la naturaleza es la esencia de la noción de la vida lenta. Es una sensación de serenidad y perspectiva de lo que realmente necesitamos para sentirnos felices y confortados. Cada vez somos más conscientes de lo que comemos, de lo que llevamos puesto y de cómo nos comportamos, y eso afecta directamente al tipo de impacto medioambiental que generamos.
Tom y Amy, conocidos como Van Monkeys, se definen a sí mismos como espíritus libres que dejaron atrás una vida estructurada para vivir en una furgoneta. Valoran su libertad y la capacidad de explorar la naturaleza, así que dejaron atrás las exigencias de sus empleos para buscar un equilibrio justo entre vida y trabajo. Menos se convirtió en mucho más para ellos, y la felicidad está en las cosas sencillas, como su perro Frankie, a quien describen como un compañero de juegos que los hace reír, se apunta a todas las aventuras y los motiva a salir al aire libre aunque haga mal tiempo.
3. Planifica. Y, luego, planifica un poco más.
Cuando nos decidimos por una expedición o una aventura, por grande o pequeña que sea, la planificación es esencial para que todo salga bien. Conocer la zona que vas a explorar es esencial para la armonía del viaje. El tiempo, el terreno y la naturaleza son factores variables, y merece la pena dedicar tiempo a prepararse. La planificación no solo te dará tranquilidad, sino que también te ayudará a distribuir los recursos de manera inteligente. Los alimentos y el combustible son recursos que quedan bajo tu control, y que afectan directamente a tu impacto medioambiental. Decidir las rutas más eficientes y llevar las comidas organizadas ayuda a reducir esta huella.
El colectivo Van Monkeys afirma que la fase de planificación es la más importante para que una aventura salga bien. Cuando viajan a algún lugar, buscan lugares para aparcar la furgoneta con mucha antelación, y tienen ya pensadas varias alternativas, por si acaso, para reducir la pérdida de tiempo y el desperdicio de combustible. Su mejor consejo para la planificación: “hay que llevar encima una copia impresa [o descargada] de los documentos y los mapas importantes por si en algún sitio la cobertura es limitada.”
4. Viajar con inteligencia
Vale, ya has escogido un lugar épico para la excursión del fin de semana. Lo siguientes es: ¿cómo vas a llegar hasta ahí? La primera manera de reducir el impacto medioambiental de tu viaje puede ser tan simple como optar por el transporte público en lugar del coche. Es probable que subirse a un autobús o a un tren sea una opción más barata que conducir y, por supuesto, reduce el consumo de combustible, aunque no siempre dispondrás de esta opción si te diriges a un lugar más rural. Las redes de coche compartido son una forma muy popular de reducir las emisiones, porque permiten compartir el vehículo con otras personas que ya van al mismo sitio que tú. Puedes buscar grupos locales en Facebook, o probar en foros de senderismo de la comunidad.
Por otra parte, es posible que puedas hacer una ruta espectacular directamente desde la puerta de tu casa. ¿Has explorado ya los lugares secretos más cercanos a donde vives? Si te mueves por tu zona, los costes de desplazamiento se reducen, consumirás menos combustible y el viaje será más ecológico, además de quitar trabajo de planificación logística y dejar más tiempo para las cosas divertidas. Explorar por tu zona es una oportunidad estupenda de conocer mejor tu tierra y volver a enamorarte del lugar donde vives.
5. No dejes atrás nada; no te lleves nada
Es un concepto sencillo, pero crucial. En resumen, trata todo lo natural como si su sitio fuera *exactamente* el lugar donde lo encuentres. Hojas, piedras, flores, caracolas, árboles, ¡todo! Vale: cortar una flor o llevarte una piedra de recuerdo puede parecer insignificante, pero el efecto acumulativo de cada cambio que hacen los humanos, por pequeño que sea, puede generar daños significativos a largo plazo. Esto incluye quitarle corteza o ramas a un árbol vivo para encender una hoguera, o clavar clavos en un tronco para colgar una hamaca o fijar el viento de una tienda de campaña. Hay una armonía delicada en los espacios naturales y, si los visitamos con respeto, nuestro impacto será mínimo.
Lo que viene en la mochila, vuelve en la mochila. Esto significa que te tienes que llevar a casa todo lo que lleves encima cuando salgas de excursión. Cuenta cuántos residuos llevas, y vuelve a contarlos cuando los vuelvas a meter en el equipaje. Puedes usar bolsas con cierre hermético tipo ziplock o contenedores reutilizables para mantener los residuos separados del resto de tus pertenencias en la mochila. Si llevas un recipiente específico para los residuos, también podrás ir recogiendo otra basura que te encuentres por el camino.
6. Acampada ecológica
Cuando sea posible, acampa en lugares autorizados. A todos nos gusta inspirarnos en fotos de ensueño que vemos en Instagram, pero limitar el tráfico a las zonas de mayor afluencia es una de las mejores prácticas para acampar con bajo impacto. Hay varios consejos clave para acampar de manera responsable: aléjate más de 60 metros de cualquier fuente de agua, elige terreno resistente cuando sea posible, no acampes dos noches seguidas en el mismo sitio y vuelve a naturalizar el sitio antes de irte (con un cepillo, barre las huellas que hayas dejado y las zonas que hayan quedado aplastadas para reducir el rastro de tu paso). Consulta además la legislación de la zona y diferentes guías de la naturaleza.
No te salgas del camino. Un sendero marcado es una ruta segura para los senderistas, para la flora y para la fauna, y es muy recomendable no salirse de ellos. Esto es simplemente para proteger la tierra y evitar accidentes en cualquier terreno potencialmente inestable. Cuando recorras tierras de cultivo o camines sobre hierba, ten más cuidado al pisar, ya que son terrenos más frágiles.
Una hoguera crea un ambiente maravilloso. Es una tradición que hemos heredado de las expediciones antiguas, pero no son imprescindibles. Si estás pensando en comer caliente, prueba con un hornillo portátil. Es económico y adecuado para la mayoría de las condiciones meteorológicas, y hay diferentes tipos de hornillos para diferentes tipos de excursiones. Si buscas abrigo, puedes echar mano de una manta de buena calidad y prendas térmicas, con lo que además te libras del olor a humo cuando apagas el fuego. De esta manera protegerás el suelo y no molestarás a la vida silvestre.
7. Ama a tu prójimo senderista
Un elemento importante del senderismo es procurar que la comunidad sea un lugar seguro y positivo. La naturaleza es un respiro terapéutico para muchos; lo natural es ser amable y respetuoso con demás senderistas. Esto significa que no debemos hacer ruido, debemos ser educados, hablar en voz baja y evitar las alertas sonoras del móvil, ya que muchos senderistas salen al campo para desintoxicarse de la tecnología digital.
Esto mismo también vale para la vida silvestre. Viajar en silencio y con serenidad reducirá el estrés que sufren los animales. Encontrarnos con animales preciosos mientras practicamos el senderismo es un gran atractivo en cualquier viaje, y deberías sentirte privilegiado por compartir su hábitat. Si te cruzas con algún animal, obsérvalo en silencio. Resiste la tentación de tocar o recoger animales salvajes, y no les des comida. Además, si no representas una amenaza para ellos, estarás a salvo de los movimientos defensivos que puedan realizar. Dicho esto, no te olvides de echar la cámara y hacer fotos para acordarte de ese momento toda la vida.
‘Leave No Trace’ es una organización sin ánimo de lucro que ha definido siete principios para inspirar a todo el mundo a reducir al mínimo su impacto en el medio ambiente cuando salimos a la naturaleza. Estas directrices sencillas y éticas fomentan la preservación y la prevención de daños a la naturaleza durante nuestras aventuras. Son un recurso estupendo, y te recomendamos consultar estos principios cuando planifiques tu viaje.
La comunidad mundial de senderismo valora la importancia de pasar tiempo en el mundo natural. Si tú también eres así, seguramente conocerás a otros senderistas que estarán encantados de charlar contigo. Hay grupos de Facebook y comunidades online excelentes para conectar con otras personas; echa un vistazo a Hikesofficial.com, una comunidad apasionada de senderistas de toda Europa que comparten reseñas de rutas y aspiran a que las excursiones de senderismo sean más sostenibles.
Sea cual sea tu aventura, ten en cuenta estos consejos para que tu viaje sea más consciente con nuestro planeta mientras disfrutas de una vida activa y viajas.